Dia de Jalogüin (Halloween) por Manuela Sánchez.

DIA DE JALOGÜÍN (HALLOWEEN) Ya sé que las costumbres sociales evolucionan con el paso del tiempo y se adaptan a las nuevas situaciones y realidades, como es evidente. Cada cual puede adaptar sus costumbres de la forma que le parezca más oportuno y así educar a sus hijos. ¡Faltaría más! Es responsabilidad exclusiva de los padres educar a sus hijos y hacerlo atendiendo a sus propios principios. Así que si los chavales se quieren disfrazar de muertos en la noche “Jalogüín”, aunque sea una costumbre anglosajona adquirida a través de la televisión, o de cualquier otro personaje siniestro para divertirse, no hay por qué recordar que están en su perfecto derecho, siempre y cuando lo hagan con el consentimiento de sus padres. Por otra parte, esto puede deberse a que hay muchos padres que han renunciado a la obligación de educar a sus hijos y consienten cualquier deseo infantil por complacerlos y no disgustarlos. Recuerdo, que cuando era pequeña, estas fechas de Todos los Santos y el día de difuntos, nos reuníamos toda la familia en casa de los abuelos para merendar y charlar sobre las historias de nuestros antepasados. El espectáculo que presenciábamos a la hora de merendar era verdaderamente espectacular. ¡Esa torre de dulces que se situaba en el centro de la mesa principal!, ¡qué ricos y que ilusionantes! Constato sin más, que con el paso del tiempo se están perdiendo muchas costumbres españolas, como la de asar castañas en casa o tomar frutos secos como las nueces, comprar los exquisitos huesitos de santos, o incluso ver la famosa representación teatral de “Don Juan Tenorio” que ya ni figura en la programación de ninguna cadena de televisión. La cosa ha cambiado tanto que ya nos asemejamos demasiado a los americanos en la moda de permitir que los niños recorran el vecindario llamando a las puertas repitiendo: “truco o trato”, traducción un tanto libre del inglés de la expresión “truk or treat”, que viene a significar algo así como “o llegamos a un acuerdo o te hago una travesura”. Es conveniente incidir en el hecho de que los padres deben de enseñar a sus hijos que la vida en sociedad se basa en el respeto y en la convivencia, conservando tradiciones que forman parte de nuestra cultura. ¿No parece que se nos escapan los hijos cogidos de la mano de las diversiones impuestas por costumbres ajenas a nuestra cultura hispana? Por desgracia, en estos días hemos tenido que ver en las noticias la terrible desgracia ocurrida en el recinto de Madrid Arena, donde varias chicas jóvenes, incluso una menor de edad, se han dejado llevar por la moda de las fiestas multitudinarias que escapan de cualquier control razonable, y han sido víctimas de una avalancha humana que las ha aplastado en el medio de un pasillo de acceso al recinto de la fiesta. Otro grave incidente sucedió en el Botellódromo de Granada, con incidentes entre los participantes en la fiesta y la policía. No son los únicos casos en los que se evidencia el descontrol en el que se sumen los jóvenes en momentos en los que quieren divertirse, particularmente en estas fechas en las que parece obligado asistir a una fiesta que, por otra parte, no tiene ninguna tradición en España. Esto nos tiene que dar mucho que pensar. En lo que a mi respeta, no hago más que darle vueltas a la cabeza pensando si, en realidad, ¿no será que me estoy haciendo mayor y por eso me extrañan estas modas? Manuela Sánchez Ramos. Tutora 3ºC