Cuenta la leyenda que en el año 1848 había un hospital psiquiátrico muy cerca de aquí. En él habitaban niños y niñas que tenían mal comportamiento, los trabajadores y la jefa de todos, "la monja".
A la jefa la llamaban así porque le gustaba vestirse de monja, era muy mala ya que lo que más hacía era maltratar a los niños y niñas para que le hicieran caso.
Un día pilló a Malvaloca pintando las paredes de morado. Y diréis ¿Malvaloca? Sí, le llamaban así porque le gustaba el color morado y parecidos y estaba muy loca. Y bueno, la monja le pegó con una escoba para que no hiciera más cosas malas, con la mala suerte que el fuerte golpe le hizo tanto daño que se quedó coja.
Pasado un tiempo Malvaloca se quedó sola con la jefa cerca de unas escaleras y, en un ataque de ira, le dio un empujón que hizo que rodara la monja piso abajo y muriera. Ella empezó a reír y gritar loca de contenta.
- "¡Ya no harás más daño!", gritaba.
Pero para sorpresa de todos la monja regresó aún más malvada y los fue matando a todos uno a uno.
Tras tres golpes en la puerta y siempre cerca de una escalera morían todos sin poder evitarlo. Dejó para el final a Angustias, que así se llamaba Malvaloca, y antes de quitarle la vida le arrancó todos los pelos.
El hospital lo cerraron y pusieron en ese lugar un cementerio y a la calle la llamaron Malvaloca.
Ahora dicen que el centro es un lugar fantasma y todos siguen allí y han cumplido sus sueños: doctores, cantantes, cocineros,... Y que la dueña, la jefa, sigue deambulando sola buscando a niños y niñas desobedientes para llevárselos con ella.
Fd:Inmaculada P.R.
